Esta historia va sobre un príncipe llamado Walid que es noble, amable, simpático y generoso. Un día decidió hacer un certamén de poesía, y al terminar, le ganaba una persona que era pobre y tejedor de alfombras cual nombre era Hammad.
En el tercer concurso de poesía, Walid decidió darle al ganador, aparte de la bolsa de oro, el trabajo de organizador del viejo archivo.Tal como supo la persona que le ganó en los últimos dos concursos de poesía ganó de nuevo.
Cuándo fue a su castillo, le dijo que organizaría el archivo en orden cronológico y después tejería una alfombra a su gusto.Después de tres años Hammad terminó de ordenar el archivo y cuando Walid lo comprobó, le dijo que hiciese una alfombra que contuviese toda la historia del mundo.
Walid era ahora el rey de su reino porque su padre cayó enfermo y murió, y recordó las palabras que le dijo su padre:
-La vida nos devolverá todo lo que le demos.
Unas semanas después, Walid mandaban a personas a ver la alfombra pero todos decían que no les dejaban verla.Después fue él en persona (pues era el rey) y intentó ver la alfombra él mismo, vino con dos guardias (tuvo momentos de agresión anteriormente) y fue a sus aposentos. Él seguía insistiendo en que nadie puede verlo, tenía una luz pobre en la lampara de aceite y apenas reconoció al rey Walid , pasando el tiempo se volvió más loco y ciego, apenas comía.Las personas escuchaban sobre él y decían que le estaban ayudando los djinns(los dioses del desierto). Y cuando pasaron más semanas decidió ir él solo a verlo y cuando llegó lo encontró en el suelo muerto, fue a mirar la alfombra arrepentido de la muerte de Hammad, miró a la alfombra y empezó a marearse dejó de mirar la alfombra y la encerró en una habitación llena de candados para que nadie la robase.
